El regreso de esta especie comenzó en 2007 y continúa hasta el día de hoy. El proceso de reintroducción implica el rescate de individuos (especialmente huérfanos) en otras provincias argentinas, la rehabilitación en el Centro de Rescate Anteater de Corrientes y, finalmente, su liberación en el Parque Iberá y el monitoreo de su adaptación a una vida de libertad.
Desde el inicio del proyecto, más de 100 osos hormigueros han sido rescatados y liberados y ahora se están reproduciendo y reproduciendo en libertad, dando como resultado una gran y saludable población de osos hormigos gigantes salvajes en el Gran Parque Iberá.