La tarde del sábado en Ushuaia se presentaba tranquila mientras en la calle Kuanip al 1300, en las cercanías de la unidad básica del Partido Justicialista (PJ), un grupo de familias y militantes se reunía para un acto en respaldo a la candidatura de Cristina Fernández de Kirchner como presidenta del peronismo.
El evento, que pretendía ser una expresión de apoyo y unidad, se vio abruptamente interrumpido por disparos y un herido de bala. La legisladora Victoria Vuoto, quien organizó el evento y se encontraba presente, expresó horas después su condena a lo sucedido: “Repudio enérgicamente estos gravísimos hechos. La política es un espacio de encuentro y diálogo. Nunca de violencia”.
El acto había transcurrido en calma, con el intendente de Ushuaia, Walter Vuoto, como orador principal. Vuoto, un fuerte referente del PJ fueguino y hermano de la legisladora Victoria Vuoto, resaltaba la importancia de un proyecto político sólido y hablaba a los asistentes en un ambiente festivo, en el cual se encontraba una multitud de familias y trabajadores.
Sin embargo, al término del evento, todo cambió: un vehículo desconocido, desde la distancia, disparó hacia el grupo que comenzaba a retirarse. Entre los presentes, se desató la confusión y el miedo, mientras algunos militantes corrieron a resguardarse.
Uno de los disparos alcanzó a Martín Pipet, de 35 años, quien resultó herido en el muslo derecho. Pipet, identificado con el sindicato de Camioneros, cayó al suelo entre gritos y corridas.
Según confirmaron las autoridades médicas, la bala le atravesó el muslo, y le provocó un orificio de entrada y salida. Lo trasladaron rápidamente al Hospital Regional Ushuaia, donde fue estabilizado y se confirmó que estaba fuera de peligro.
El PJ de Tierra del Fuego emitió un comunicado: “Queremos expresar nuestra solidaridad a todos los militantes, trabajadores municipales y familias que asistieron al acto, quienes merecemos un entorno seguro y respetuoso”.
Mientras Pipet recibía atención médica, las fuerzas de seguridad iniciaron un operativo en la zona con el fin de localizar el vehículo desde el cual se efectuaron los disparos. Testigos describieron el auto como un Audi negro, aunque la búsqueda se extendió a otros modelos y marcas, en previsión de cualquier posible cambio. Los agentes bloquearon varias cuadras en torno al lugar del hecho, pero el vehículo ya había salido de la ciudad y se dirigía hacia el norte, lo cual complicó la operación inicial.
La búsqueda finalmente rindió frutos en un control de ruta en Tolhuin, a varios kilómetros de Ushuaia, donde detuvieron a Maximiliano Perpetto, quien fue señalado por varios testigos como el autor de los disparos. Perpetto viajaba a bordo de una camioneta Toyota Hilux conducida por Ramón “Moncho” Calderón, un dirigente de la CGT Ushuaia y representante sindical en el sector gastronómico. Las autoridades confiscaron el vehículo y Perpetto fue trasladado para ser interrogado.
Según fuentes consultadas, Perpetto mantiene un conflicto sindical de larga data con el gremio de Camioneros, lo que podría ser la causa detrás del violento episodio. El trasfondo de la interna sindical, que ya ha escalado en varias ocasiones previas, sumado a la relevancia del acto, habría desencadenado el incidente. Las autoridades investigan ahora el rol que habría jugado Calderón en los hechos y si su vínculo con Perpetto podría haber facilitado la fuga.
El intendente sostuvo que la política debe ser “un espacio de respeto y diálogo, sin ningún tipo de violencia”, y agradeció el rápido accionar de las fuerzas de seguridad que permitieron esclarecer lo sucedido y dar con el sospechoso.
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Los investigadores ahora buscan reconstruir la secuencia exacta de los hechos y esclarecer los motivos del ataque, mientras el contexto sindical sigue en la mira. Según voces cercanas al caso, existen antecedentes de enfrentamientos previos entre Camioneros y ciertos sectores representados por Perpetto. La policía evalúa si este incidente se relaciona con disputas políticas o si tiene sus raíces en conflictos laborales, lo cual determinará el curso de la investigación.
Este episodio de violencia durante un acto político revive preguntas sobre la seguridad en eventos de participación ciudadana y la urgencia de medidas para prevenir situaciones similares en el futuro. La comunidad de Ushuaia espera que se tomen medidas adecuadas para asegurar que actos de esta naturaleza no vuelvan a repetirse y que el ambiente político pueda mantenerse en paz y sin incidentes.
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