La noche del 30 de diciembre de 2004, el país sufrió una de las mayores tragedias, al incendiarse en el barrio Once de Buenos Aires, el boliche República Cromañón, mientras se llevaba a cabo el recital del grupo de rock Callejeros, que dejó un saldo de 194 muertos.
Previo a conmemorarse 20 años de aquel fatídico suceso, el periodista Bruno Larroca comenzó una gira por distintas provincias con la compañía de Diego Cocuzza, sobreviviente de la tragedia y miembro de la Asociación “No Nos Cuenten Cromañón”, para presentar su libro “Voces, Tiempo, Verdad”, que recopila testimonios y análisis del lamentable suceso. Además, se brinda un debate abierto con el público que permite tomar conciencia sobre lo ocurrido.
La obra se presentó en el auditorio de la Tierra Sin Mal, de la ex Estación de trenes de Posadas y contó con la presencia de miembros de la Asociación “No Nos Cuenten Cromañón”, sin embargo el autor de la misma no pudo estar presente por problemas personales.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, Cocuzza contó que la idea de esta presentación es hablar sobre una de las tragedias “no natural más grande de la historia de nuestro país. El libro habla del antes, del durante y del después de Cromañón. Tiene varias aristas, se divide en capítulos que hablan de diferentes temas, desde la música por ejemplo; como era antes, cómo fue después y hay un testimonio que nos dio para ese capítulo el Indio Solari, que nos brindó una entrevista”.
Otro de los puntosde vista que trata el material es el plano judicial: “Cómo se trató el tema pos Cromañon y el circo judicial que se armó alrededor de eso, desde la sociología, la psicología, cómo llegamos a que ocurra Cromañón, desde la producción, desde la política también el manoseo que se generó luego y antes también, porque por algo llegamos a que ocurra. Hubo corrupción del Estado, de la política y es muy importante hablar de eso justamente”.
El referente también indicó, que luego del incendio de Cromañón, cambiaron muchas cosas en la realización de los espectáculos “Creo que la gente entendió que había cosas que eran una costumbre que estaban mal; la utilización de pirotecnia en recitales que no se hace más y si se hace es repudiado, quiere decir que en ese sentido aprendimos algo”.
Además, indicó que también cambiaron las regulaciones y habilitaciones de estos espacios, pero “el problema que hay es que sigue existiendo la corrupción, por más regulaciones que haya, si no se cumplen, es lo mismo. No estamos exentos de que vuelva a ocurrir algo similar”, advirtió.
Con respecto a la gira, en la que ya recorrieron 34 ciudades y agradecieron la respuesta del público, a pesar de que esto sucedió en la Ciudad de Buenos Aires “nos pasó a todos como sociedad. Entonces está bueno que podamos hablar de Cromañón en todos los rincones de nuestro país, eso es lo que nos propusimos y que vamos a cumplir antes de fin de año, antes de los 20 años de Cromañón”.
Finalmente, agregó que también se habla del tema en las escuelas secundarias “sobre todo en Buenos Aires por una cuestión de distancia, pero sí hablamos con los pibes y las pibas que todavía no habían nacido cuando ocurrió Cromañón. Es muy importante que se mantenga la memoria viva para que no vuelva a ocurrir algo similar”.