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Resistencia
22 octubre, 2024

La trama detrás de la bandera que Los Monos colgaron en la tribuna de Rosario Central y la extraña cita a Boca

Cuenta la leyenda que el eslogan «Siempre mono nunca sapo» lo acuñó la barrabrava de Boca hace unos 20 años durante una seguidilla de violentos partidos con River en Mar del Plata, Mendoza y Núñez. La frase ya es una marca registrada: enmarca el dibujo de la cara de un gorila furioso que lleva con un gorro tipo piluso con el numero 12. Es parte del merchandising xeneize.

Se supone que los «monos» son los de Boca y van al frente y los «sapos», los delatores, son los de River. Hasta ahí no sorprende, es la lógica de las hinchadas. Lo que sí es extraño es que el pasado domingo una versión rosarina de ese escudo bostero apareció en el Estadio de Rosario Central durante el partido que ese equipo disputaba con Banfield.

En lugar del número 12 en el gorro del gorila había un 17 y debajo del mono se leía la sigla «LMQ». La bandera, modesta en su tamaño, se desplegó luego de que, desde ese sector, se tiraran bombas de estruendo al campo. Llevaba como lema principal una frase claramente amenazante: «No respetamos a nadie».

Otro detalle para nada menor: según muestran las fotos, «el trapo» fue colgado por jóvenes con las cabezas tapadas y en cuyas remeras con los colores de Rosario Central se leía –además del misterioso numero 17– la leyenda «Samuel Siempre Presente» escrita en la espalda.

La bandera se desplegó en la popular norte que ocupa históricamente la barrabrava y da al club Regatas. La colocaron cuando se tiraron las bombas de estruendo –que atontaron unos minutos al arquero de Banfield– y los jóvenes se pusieron de espaldas para mostrar la leyenda de su camiseta.

Una bomba de estruendo cayó en la cancha antes de que apareciera la bandera de Los Monos en la tribuna de Central. Foto Seba GranataUna bomba de estruendo cayó en la cancha antes de que apareciera la bandera de Los Monos en la tribuna de Central. Foto Seba GranataTodo estuvo montado para mandar un mensaje… ¿Pero cuál? y ¿A quién?

Una primera lectura apunta a un homenaje, reivindicación, aviso de venganza por el crimen de Samuel Miqueas Medina (25), yerno de Ariel «Guille» Cantero y hombre con una relación de años con Andres «Pillín» Bracamonte, líder de la barra de Central.

«El Gordo Samu» –como le decían a Medina fue emboscado la tardecita del primero de octubre cuando llegaba a su casa. Volvía en su Volkswagen Polo de ver el partido que Rosario Central le ganó a Vélez. Con él iban su sobrino y su sobrinita de 10 años. Lo atacaron sicarios en dos motos. «Samu» terminó con 16 balazos. Sus sobrinos se salvaron de milagro.

Medina es una de las claves para entender el episodio del domingo en la cancha de Rosario Central.

El 17 y el nombre Samuel en las espaldas de algunos barras durante la exhibición de la bandera con la leyenda El 17 y el nombre Samuel en las espaldas de algunos barras durante la exhibición de la bandera con la leyenda «No respetamos a nadie». Foto Seba GranataSegún fuentes consultadas por Clarín, el numero 17 apuntaría al nombre del barrio donde se crio «El Gordo Samu», el «17 de agosto» que no es donde vivía al momento que lo atacaron.

Por otro lado, la sigla LMQ querría decir «La Mafia de Quique» (al parecer otro de sus apodos) o «La Mafia Quiqueña». Que se haya usado un emblema de Boca Juniors para recordarlo tal vez no sea casualidad ya que Medina mantenía buenas relaciones con un sector de barrabrava de Boca.

En otras palabras, lo que pasó el domingo tiene directa relación con la muerte de «Samu». En Rosario se dice que Ariel «Guile» Cantero –preso y en aislamiento en Marcos Paz– le mandó decir a la madre de Medina que algo iba a hacer en el partido y la bandera fue la manera de cumplir su promesa.

Caras tapadas alrededor de la bandera que atribuyen a Los Monos en la barra de Central. Foto Seba GranataCaras tapadas alrededor de la bandera que atribuyen a Los Monos en la barra de Central. Foto Seba GranataHay que recordar que en plena puja por el poder y desde la cárcel, «Guille» Cantero, mandó a confeccionar una bandera inmensa en la que se veía un mono con anteojos, un gallo (por Leandro «El pollo» Bassi) y un Toro (por Carlos «El Toro» Escobar).

La barra de Newell’s la desplegó durante el partido de homenaje a Maxi Rodríguez. Llevaba la leyenda «Nosotros estamos mas allá de todo» en letras gigantes.

Fuentes del Club Rosario Central adelantaron a Clarín que este martes presentarán un pedido de aplicación del derecho de admisión para los barras involucrados en el episodio del domingo. A su entender, el incidente tiene que ver con un grupo de hinchas del que formaba parte «Samu» y que tienen la intención de levantar el perfil. Por este motivo, habrían sido «castigados» por la propia barra de Central a la salida del partido.

«Samu»: venganza y poder

El crimen de «Samu» está siendo investigado por el fiscal Luis Schiappa Pietra. Todavía no hay detenidos pero el runrún apunta a dos hipótesis:

1) Que a Medina lo mataron en una disputa por el poder dentro de la barra de Rosario Central con la gente de Andrés «Pillín» Bracamonte.

2) Que tanto «Samu» (que terminó muerto) como «Pillín», que fue baleado el 11 de agosto pasado, fueron objetivos de una venganza por un cargamento de cocaína «perdido».

Andrés Andrés «Pillín» Bracamonte, líder de la barra de Central.La interna por los negocios de la barra podría ser el origen de la frase de la bandera «No respetamos a nadie». Sin embargo, la teoría de la venganza narco no la descarta nadie, más teniendo en cuenta que cuando balearon a Bracamonte le dejaron una nota que decía: «Piyin Bracamonte, devolvé los kilos, ni la fiscalía te va a salvar».

Samuel Miqueas Medina se presentó en sociedad en enero de 2021 con una foto fuerte: con la cara tapada y empuñando una pistola, abraza a Luciano «Lucho» Cantero, hijo de «El Pájaro» Cantero, cuyo crimen, en mayo de 2013, inició la guerra narco en Rosario. Otros seis hombres miran a cámara, cada uno con un arma en la mano, y parecen alistarse para atacar.

«El Gordo Samu», de azul, al lado del rapero Zamaray (der.) y «Lucho» Cantero (izq.), con la cara semi tapada.Como novio de Paula Bay, hija de Vanesa Barrios (esposa de Ariel «Guille» Cantero), Medina construyó un vínculo familiar con el líder de Los Monos. Paula no es hija de «Guille», sino de una pareja anterior de Barrios, pero el lazo es igualmente fuerte.

«El Gordo Samu» no era cualquiera y por eso su crimen cayó como una bomba en Rosario, donde la tasa de homicidios se había derrumbado en 2024: en los ocho primeros meses de 2024 se había reducido de 190 a 66 en relación a 2023.

En ese contexto, la bandera del domingo ¿será un episodio aislado o una declaración de guerra?

MG

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