El 21 de noviembre de 1990, un año después de que se presentara en sociedad la reforma del Estado, el gobierno de Carlos Menem anuncia la privatización de Aerolíneas Argentinas.
El traspaso a la empresa española Iberia no sólo resultó ser un caso emblemático de vaciamiento, sino que también estuvo signado por diversas denuncias de irregularidades y corrupción.
Antes de la transferencia, el Estado absorbió la deuda de la compañía.
El consorcio español desembolsó solamente 260 millones de dólares en efectivo y el resto lo pagó en títulos públicos.
La privatización, además de ser una venta por un valor tres veces menor, significó el desmantelamiento de la empresa. Se entregaron aviones, simuladores de vuelo, oficinas, rutas, la red de procesamiento de datos y el sistema de reservas.
Y lo que es peor de todo, el capital por todas las ventas y operaciones inmobiliarias nunca llegó ni a Aerolíneas, ni al país. Quedó en poder de Iberia.
Cuatro años más tarde, la empresa norteamericana American Airlines se incorporó a la sociedad, pero no pasaron dos años cuando se retiró definitivamente, dejando una deuda de 874 millones de dólares.
Aerolíneas Argentinas estaba en bancarrota.
En 2001, bajo la presidencia de Fernando De la Rúa, el gobierno español cedió la firma al Grupo Marsans, que adquirió el 92 por ciento de las acciones. Sin embargo, se sucedieron nuevas denuncias que incluyeron el robo de bienes de la empresa, entre otras irregularidades.
Finalmente, en 2008, como resultado del vaciamiento y la desinversión, el gobierno argentino volvió a hacerse cargo y a recuperar el control de Aerolíneas Argentinas.
Después de su reestatización en 2008, Aerolíneas Argentinas hoy cuenta con 80 aviones y llega a 39 destinos locales y 21 internacionales. Para fin de año se espera superar la marca histórica de 13 millones de pasajeros. En 2018 batió un record en puntualidad y al año siguiente fue elegida como la mejor aerolínea latinoamericana.
Esta privatización ha sido considerada una de las más ruinosas del menemismo. Los números así lo demuestran.
(Esta cápsula forma parte del ciclo “40 años de democracia” que se emite todos los miércoles y domingos por la TV Pública)