Lo que ocurrió en el Palacio Ducó tiene pocos antecedentes: Julio César Falcioni vivió un momento de furia contra el árbitro Ariel Penel y lo empujó en la mitad de la cancha. El entrenador del Taladro le reclamó por un supuesto penal para su equipo, que perdía 1-0 ante Barracas Central, pero el árbitro lo desestimó. Ante la insistencia del Emperador, Penel le mostró la roja y el DT se sacó: lo persiguió y lo empujó con su mano derecha.
Es que el Emperador había quedado muy enojado con el árbitro del encuentro por una jugada que se dio en el ocaso del primer tiempo. Juan Pablo Álvarez fue al espacio para intentar recibir un pelotazo largo y, cuando estaba por bajar la pelota, sintió un contacto propiciado por Nicolás Capraro y cayó al piso.
De manera inmediata, Penel consideró que no fue penal y dejó que el juego continuara. El árbitro tampoco recibió el llamado desde el VAR cuando el balón salió de la cancha. Todo esto provocó un gran enojo de los integrantes del banco del Taladro, quienes consideraron que fue un claro penal y que la jugada debía ser revisada.
La realidad es que el juego siguió hasta que se cumplió el tiempo y, mientras los equipos se retiraban hacia sus vestuarios, Falcioni protestó y esta situación le valió la roja. Después llegó el empujón.
En el segundo tiempo, Falcioni apareció más tranquilo en una de las cabinas del Ducó. ¿Cuántas fechas le darán al DT de Banfield?
Julio César Falcioni, echado por Penel en el entretiempo, miró el segundo tiempo desde el palco.