Al cumplirse dos años de gobierno provincial, la gestión de Leandro Zdero presenta un balance donde los ejes centrales son la seguridad, la transparencia y el desarrollo económico. La administración destaca que estos lineamientos no solo ordenaron la administración pública sino que marcaron un cambio de rumbo frente a desafíos históricos del Chaco.
En seguridad, se destacan acciones concretas como el lanzamiento del Operativo Frontera Húmeda en Isla del Cerrito, orientado a combatir narcotráfico, contrabando y crimen organizado, logrando el récord nacional de incautación de droga. A ello se suman la entrega de patrulleros, la inauguración del Centro Multiagencial de Emergencia en Resistencia, la provisión de 100 dispositivos duales (para atender violencia de género) y la recuperación de terrenos y propiedades tras un proceso de usurpaciones: gestos de control territorial y restitución del orden público.
En el plano económico, la administración apuesta a reactivar el aparato productivo y atraer inversiones. Entre sus medidas figuran la reactivación del programa PROGANO —que permitió impulsar la industria ganadera—; la creación de una agencia de inversión, la reducción de impuestos provinciales, y el refuerzo del comercio exterior, lo que se tradujo en un récord histórico de exportaciones en octubre de 2025. Con estas acciones, el gobierno busca ordenar y modernizar la estructura productiva chaqueña, fomentar empleo y dar previsibilidad a emprendedores y empresas.
La transparencia —un reclamo persistente en la provincia— también ocupó un lugar central en estos dos años. En ese sentido, una de las medidas más emblemáticas fue la resolución de que los inmuebles incautados a los llamados “piqueteros VIP”, procesados por lavado de activos, sean destinados a dependencias estatales como comisarías, bases de bomberos, sedes del Servicio Penitenciario o sedes para oficinas de delitos económicos. De esta manera, propiedades antes vinculadas a corrupción pasan a reforzar la estructura pública de seguridad, en lo que desde el gobierno se interpreta como un acto de justicia institucional y un paso hacia la reconstrucción del Estado.
El gobierno también mantiene políticas activas en salud, educación e infraestructura —sectores imprescindibles para la calidad de vida. Se destacan operativos sanitarios en zonas vulnerables, entrega de ambulancias y equipamiento hospitalario; la entrega de 300.000 libros a establecimientos educativos y la provisión de conectividad vía antenas satelitales a escuelas rurales; así como numerosas obras públicas: avenidas en Resistencia, el acuerdo para la construcción del segundo acueducto provincial, reparaciones de rutas nacionales y provinciales, e inicio de nuevas pavimentaciones.
En síntesis, la gestión de Zdero llega a su segundo aniversario con un conjunto de políticas cuya lógica intentó ser coherente: el eje de la seguridad garantizando orden y tranquilidad; la transparencia recuperando bienes del Estado y utilizándolos para fines públicos; y el desarrollo económico promoviendo inversión, producción y empleo. Para un contexto cada vez más exigente, el gobierno sostiene que este camino busca restaurar la institucionalidad, fortalecer al Estado y sentar bases para un crecimiento sostenido.