El uso de datos móviles en América Latina va en aumento constante. Hacia finales de 2024, la tasa de adopción de internet móvil en la región era del 64% de la población. Esto equivale a 413 millones de personas, de acuerdo a un estudio de GSMA Intelligence.
Las estimaciones para 2030, de acuerdo a las métricas actuales, es de un crecimiento del 10% de la población, hasta llegar a 74%. Para febrero del 2025, el consumo mensual de datos en la región fue de 15.2 GB por dispositivo.
Estos valores se encuentran por debajo de la media global, que sitúa el consumo global en 21.6 GB por dispositivo. Sin embargo, es importante evaluar estas cifras en contexto, pues hay una clara tendencia creciente.
Un factor que determina este crecimiento es la expansión de redes más modernas, como 5G, que está siendo adoptada en distintos países de la región. Pero el acceso a los datos móviles es desigual en los distintos países.
A grandes rasgos, el costo en América Central es bajo, con un promedio de $1,50 por GB. En el Caribe encontramos un promedio de $2,15 por GB, mientras que Suramérica se eleva hasta $3,74/GB.
En comparación, Europa Occidental tiene un promedio de $2.08/GB, mientras que Norteamérica se ubica como la región más costosa en cuanto a datos móviles, con un promedio de $4,59/GB. El promedio global, en cambio, es de $2,59/GB.
Costo medio de los datos móviles por país en América Latina
Los promedios regionales, sin embargo, revelan otra historia si los miramos de cerca.
Al observar los datos disgregados por país, es notorio que varios países de América del Sur se encuentran entre los más económicos. Sin embargo, la presencia de las Islas Malvinas, que son el segundo territorio más costo en el mundo, elevan el promedio para esta región.
En Centroamérica, de igual manera, podemos encontrar a Honduras con un costo muy bajo. Mientras que en Belice el costo es más del triple.
Factores clave que impulsan las variaciones de precios
Debido a estas variaciones tan acentuadas, incluso entre países vecinos, es importante analizar qué factores clave entran en juego al definir los costos de los datos móviles en cada lugar.
Infraestructura y cobertura de la red
Uno de los principales factores que afecta el costo de los datos móviles es el desarrollo de la infraestructura de telecomunicaciones. Los países más desarrollados y más estables tienen una industria más robusta y mayores inversiones en el mantenimiento y mejora de su red.
Esto puede verse, por ejemplo, en la adopción de las redes 5G, que ha avanzado de manera lenta en América Latina. El número de conexiones 5G para 2025 se estima en apenas 7%. Esto representa un incremento frente al 5% que se observó en 2023, pero sigue siendo una cifra baja.
Los países con una inversión mayor, como Brasil, tienen un costo menor por datos móviles. Para este año, su total de conexiones a 5G es de 36,2 millones, más del doble que México, con 16,9 millones.
Competencia de mercado
La competencia es clave para el desarrollo de las industrias. Sin embargo, en la mayoría de los países latinoamericanos el sector de telecomunicaciones está concentrado en unas pocas empresas, como Telefónica o Claro.
Según un informe realizado en 2022, Honduras tenía el nivel más bajo de competencia en la región. Mientras que Chile, que tiene una economía de mercado más robusta, tenía un mayor grado de competencia.
Si observamos de nuevo los costos de datos móviles en estos países, entendemos por qué el costo en Chile es menor. Y, aunque Honduras también se encuentra por debajo de $1/GB, es también uno de los países con menor adopción de 5G.
Estabilidad económica y volatilidad monetaria
La estabilidad económica es otro factor clave. Países con bajos índices de inflación, como Colombia o Perú, tienen costos menores a $0,50 por GB. En cambio, el costo en Venezuela aumentó de manera acelerada en los últimos años, como resultado de su periodo inflacionario.
Este país, en consecuencia, también cuenta con una de las velocidades más bajas, debido a la falta de inversión en mantenimiento y mejora de la infraestructura de la red.
Normativas e impuestos
Además de la estabilidad económica, la certidumbre legal también contribuye a la fijación de precios. Si el gobierno local implementa medidas para subsidiar o fomentar el desarrollo de las empresas de telecomunicaciones, estas podrán ofrecer un mejor servicio.
Sin embargo, podemos encontrar casos como México, donde la subasta de bandas para 5G se ha pospuesto numerosas veces por parte de entidades gubernamentales. El costo del servicio, en consonancia, está entre los más caros de la región, por encima de $2/GB.
Patrones de uso y demanda
Niveles altos de adopción de smartphones también pueden impulsar al mercado de datos a bajar sus precios, ya sea ofreciendo paquetes de planes o descuentos.
Según un reporte de We Are Social, publicado en febrero de este año, el país con mayor uso de teléfonos inteligentes en América Latina es Brasil, con un promedio diario de 9 horas. Le sigue Colombia, con 7 horas.
Es interesante analizar estos dos países, pues reúnen varias de las características que señalamos aquí: estabilidad económica relativa, competencia de mercado y una infraestructura de redes sólida.
Impacto de la fijación de precios de datos en la inclusión digital
Todos estos factores que influencian los costos de los datos móviles en los distintos países de América Latina y el Caribe, tienen también incidencia en las distintas regiones de cada país.
La brecha digital entre las zonas rurales y urbanas es un tema que se debe resolver a lo largo del continente. En Bolivia, por ejemplo, la infraestructura de redes 2G y 3G es equitativa a lo largo del país.
Pero al evaluar la infraestructura de 4G, la proporción es de 64% en las zonas urbanas, versus 36% en zonas rurales. En cuanto a 5G, la empresa estatal de telecomunicaciones está comenzando su implementación durante la segunda mitad del 2025.
Tendencias que influirán en la fijación de precios
A futuro, la expansión de la red 5G tendrá un rol fundamental en la fijación de precios. Esta tecnología puede aumentar la velocidad y reducir el costo de los planes de datos.
Por otro lado, el surgimiento de operadores móviles virtuales puede aumentar la competencia entre empresas, sin necesidad de ampliar el espectro de banda. Las tarjetas eSIM, que han ganado popularidad en los últimos años por parte de viajeros y nómadas digitales, también contribuyen a aumentar la demanda de las líneas locales.
Igualmente, los servicios internacionales de recarga, como BOSS Revolution, son una herramienta sencilla y económica para recargar datos móviles desde Estados Unidos a distintos países de América Latina. En su sitio web pueden encontrarse los países y líneas disponibles, así como las tasas de cambio para cada caso.
Conclusión
Latinoamérica es una región amplia, con muchas diferencias entre sí. Las disparidades en sus contextos económicos y en el nivel de desarrollo de sus industrias genera variaciones muy pronunciadas en el costo de los datos móviles de acuerdo al país.
Aunque hay una clara tendencia a reducir los costos, y la mayoría de los países se encuentran por debajo del promedio mundial, no hay un ecosistema homogéneo que permita contar con costos parejos a lo largo de la región.
El reto para los gobiernos y las empresas de telecomunicaciones es brindar un servicio eficiente y de bajo costo a toda la población, como una clave para lograr la inclusión digital y el acceso a la información.